Universidad Andrés Bello
La Universidad Andrés Bello nace en octubre de 1988. Fue creada como un aporte al desafío de la educación superior y teniendo como uno de sus propósitos fundamentales el cumplir un rol de profundo contenido social. Esa tarea se orientó principalmente a contribuir con el esfuerzo general que debía hacer el país para ofrecer a todos los egresados de Enseñanza Media igualdad de oportunidades en el acceso a la educación superior y a grados y títulos universitarios que les permitieran progresar y surgir socialmente.
La U. Andrés Bello es un proyecto esencialmente académico y pluralista. En su formación recogió lo mejor de la tradición universitaria chilena y lo armonizó con los grandes desafíos de la modernidad. Esa fue la visión de sus fundadores, que se caracterizaron por ser profesionales de diversas áreas, formados en distintas universidades y con variadas visiones sociales. Todo ello enriqueció, de manera relevante, las primeras definiciones estratégicas de la casa de estudios.
Su misión es entregar una educación integradora y de excelencia para un mundo global, tarea que es apoyada en el cultivo crítico del saber y en la generación sistemática de nuevo conocimiento en todas las disciplinas.
Luego de obtener por primera vez la acreditación para el período 2004-2008, la Universidad Andrés Bello, fue reacreditada por la Comisión Nacional de Acreditación (CNA), por cinco años (2008-2013). En este proceso fue destacada su gestión, especialmente en áreas como vinculación con el medio e investigación.
La investigación científica que produce una universidad es una de las principales formas de medir la calidad de la enseñanza de una institución. En Chile, la producción de investigación científica era un campo restringido a las universidades tradicionales, escenario que ha cambiado drásticamente gracias al trabajo realizado por la U. Andrés Bello.
Esta casa de estudios se transformó en la primera institución privada que logró ser acreditada, considerando su nivel de desarrollo, complejidad y madurez alcanzada. Categoría que ha mantenido, y que fue ratificada por el Ranking Iberoamericano SIR, que la ubica como la única institución privada en Chile que ha tenido el crecimiento más acelerado en el área (71%), con 469 publicaciones científicas anuales, 50% de ellas en las revistas científicas más prestigiosas del mundo.
El hecho de estar acreditada en investigación reafirma el compromiso de la universidad en esta área. La Universidad Andrés Bello se destaca en este campo por el número de publicaciones, el incremento del impacto internacional de éstas, sumado a la obtención de fondos externos para la ciencia y en el apoyo con recursos internos a proyectos investigativos.
Actualmente la Universidad Andrés Bello cuenta con 14 facultades, 62 carreras y programas diurnos y vespertinos divididos en 3 sedes en Santiago, Viña del Mar y Concepción. Todo ello confirma la solidez y eficacia de la gestión estratégica de la institución, lo que permite su crecimiento bajo parámetros que aseguran la excelente calidad de la enseñanza para formar a los futuros profesionales que el país requiere.
Otro aspecto académico que la UNAB ha desarrollado de manera eficiente, son los programas de postgrado. Doctorados, magíster y diplomados, tanto presenciales como en línea, además del programa ejecutivo Advance, es la gran variedad de opciones en educación continua que permite a los profesionales potenciar el desarrollo que lograron durante la educación superior y sumar valor a su preparación como profesional con una educación de calidad.
La Universidad Andrés Bello, junto con velar por la formación profesional de sus estudiantes, también se preocupa de potenciar su desarrollo personal a través de la Dirección de Extensión Académica y Cultural. Gracias al trabajo de esa unidad, la comunidad puede participar en importantes seminarios, congresos, exposiciones, junto a otras actividades artísticas y culturales.
La moderna infraestructura de la Universidad Andrés Bello permite que los alumnos puedan desempeñarse de mejor manera a la hora de estudiar. Para favorecer su proceso de aprendizaje y enseñanza, los jóvenes cuentan con laboratorios de primer nivel, bibliotecas, centros deportivos y todos los espacios físicos necesarios para llevar lo aprendido a la práctica.
Además, para quienes pertenecen al área de la salud, cuentan con la posibilidad de realizar sus pasantías en importantes campos clínicos donde pueden conocer de manera real cómo será el ritmo de trabajo una vez terminadas sus carreras.
Gracias a todo esto y más, la Universidad Andrés Bello se mantiene firme en su compromiso con la educación integral, al abordar todas las áreas del conocimiento y contribuir con el bienestar de la humanidad, además de aportar con excelencia académica, siendo éste su fuerte sello institucional.